Noticias

Deporte y salud bucal, relación poco contemplada

03/05/2017

Por Ariel Dalino
Círculo Odontológico Santafesino

Trabajo científico. DEPORTE Y SALUD BUCAL

 

El control de la salud bucal de los deportistas es un factor pocas veces tenido en cuenta, sin embargo guarda estrecha relación con el estado general de un atleta

Las personas que practican deporte requieren tener un perfecto estado general de salud para su óptimo desarrollo. El control de la salud bucal de los deportistas es un factor pocas veces tenido en cuenta a la hora de evaluar el estado físico de los atletas, a pesar de que la boca es parte integrante del cuerpo humano y guarda estrecha relación con lo que en él sucede.
La cavidad bucal contiene una gran variedad de microorganismos que se encuentran en equilibrio en el estado de salud. Pero cuando esto no ocurre, el equilibrio se rompe, y pueden ocurrir infecciones, tales como las pulpares y óseas, caries fístulas, pericoronaritis, periodontitis, gingivitis, entre otras.
En estos casos, el organismo pone en funcionamiento su sistema de defensa, pero puede verse afectado el rendimiento de otras partes del cuerpo, la recuperación muscular, o la función renal, entre otras complicaciones. Pero el mayor riesgo es el paso de bacterias al torrente circulatorio: se afecta el estado general de la persona, y se encuentra así en inferioridad física para enfrentar la práctica deportiva.
Por otra parte, la práctica deportiva genera riesgos para la salud bucal en particular, que detallamos a continuación.

Traumas
La práctica deportiva se vincula al riesgo de que ocurran traumatismos, que pueden derivar en pérdidas dentarias o fracturas de tejido dentario u óseo. El riesgo es aún mayor en los deportes donde hay contacto directo entre los deportistas como rugby, artes marciales, hockey, etc. Es fundamental exigir el uso de protectores bucales durante toda la práctica deportiva de contacto, incluso durante el entrenamiento.

Bruxismo
El deporte puede generar momentos de tensión que pueden producir situaciones de apretamiento y rechinamiento que derivarán en desgastes dentarios o desajustes en la articulación témporo- mandibular.

Erosión dental
En los nadadores de piscinas, el contacto prolongado con el agua clorada puede producir erosión dentaria como así mismo irritación en encías. Asimismo, las bebidas energizantes y soluciones salinas pueden favorecer el proceso de erosión dental.

Barodontalgias o problemas derivados de la presión
En la práctica del buceo, vuelo en aeroplanos o actividades en las que varía la presión atmosférica, se pueden generar dolores pulpares debido a que esta intenta adecuar su presión interna.

Protectores bucales
El uso de protectores bucales como resguardo ante un inminente trauma es muy antiguo, los gladiadores romanos usaban lonjas de cuero entre los dientes. En las civilizaciones americanas ya se colocaban trozos de madera entre las arcadas dentarias a las mujeres durante el parto.
La función del protector es la de cuidar las estructuras dentarias ante traumatismos directos o indirectos. Los protectores bucales se colocan principalmente en el maxilar superior; existen dos tipos:
1. Los preformados o estándar. Se compran en casas de deportes, se moldean calentándolo con agua y se colocan en la boca para adaptarlos. Tienen la desventaja de no ser muy cómodos, y la respiración se puede dificultar.
2. Individualizados. Se realizan en el consultorio odontológico a partir de un molde de la boca del paciente sobre el cual se hace un copiado con un material termoformado. Se trata de un protector totalmente ajustado y de espesor reducido que no genera molestias al respirar ni hablar.

Conclusión
Promover los controles del estado bucal de los atletas debe ser una prioridad no solo para los propios deportistas sino también para los entrenadores, clubes e integrantes de equipos técnicos y responsables de equipos.
 

Agenda

Unknown -